domingo, 10 de mayo de 2009

Trastorno de la personalidad. Antisocial. Eq 16

TRASTORNOS DE LA PERSONALIDAD






El grupo de los trastornos de la personalidad incluye casos en los cuales el mal funcionamiento se expresa en pautas inflexibles y limitadas de conducta. En muchos casos, la inflexibilidad de la personalidad o su especial vulnerabilidad ante determinadas causas de stress pasan inadvertidas, excepto cuando se manifiestan en forma de una peculiaridad o excentricidad.




Los trastornos de la personalidad difieren de otros trastornos en que las manifestaciones psicopatológicas no se presentan en forma de alteraciones burdamente regresivas en la conducta, el afecto o el pensamiento, como en la psicosis, ni en forma de las defensas psicológicas físicas y exageradas como el psiconeurotico.




. Frecuentemente tales casos de personalidad anormal y antisocial llegan a la atención del medico o del psiquiatra a través de una tercera persona o de instituciones como prisiones o escuelas especiales. En conjunto forman el grupo de individuos que antes se denominaban “psicópatas”.


PERSONALIDAD




Para entender que es un trastorno de personalidad primero se debe de definir este concepto.




  • Es el funcionamiento personal que es resistente al cambio, se encuentra consolidada y posee una gran generalidad y coherencia de respuestas en distintos tiempos y contextos. (Eysenck, 1985).



  • Todo aquello que identifica al ser humano individualmente a lo largo del ciclo vital, por lo que debe integrarse en un modelo de personalidad desde la reactividad situacional hasta el estilo de vida, las motivaciones, creencias y concepciones del mundo. (Royce y Powell, 1983).



  • Conjunto de papeles que un ser humano desempeña a lo largo de su vida y la perturbación se concibe como aquellos papeles que son perjudiciales para los demás (el problema de las sociopatías o psicopatías, así como el de las “personalidades delictivas”).


DSM-III




Define la personalidad a partir de rasgos entendidos como: Pautas duraderas de percibir, pensar y relacionarse con el ambiente y con unos mismo y se hacen patentes en un amplio margen de importantes contextos personales y sociales. (Definición que se mantiene el DSM-III-R y DSM-IV).


Las manifestaciones de los trastornos de personalidad son reconocibles generalmente en la adolescencia, o incluso más temprano, y continúan a lo largo de toda la vida adulta (DSM-III-R).


Para que los rasgos de personalidad adquieran el carácter de convertirse en trastornos de personalidad deben poseer ciertas características, en caso de que los rasgos de personalidad sean:






  • Inflexibles o desadaptativos (sufrimiento personal).



  • Causen incapacitación social significativa (problemas sociales).



  • Disfuncionalismo ocupacional o malestar subjetivo (problemas laborales).




SISTEMAS DE CLASIFICACIÓN MÁS DIFUNDIDOS EN PSICOPATOLOGIA




  • Clasificación internacional de las enfermedades (CIE-10), realizada por la OMS 1992; es utilizada principalmente por psicólogos y psiquiatras europeos.


Se distinguen tres grandes categorías:




  1. Específicos, incluyen paranoide, esquizoide, esquizotípico, disocial, inestabilidad emocional, histriónico, narcisista, ansioso, dependiente, anancástico y sin especificar.



  2. Trastornos mixtos, se incluyen los trastornos mixtos de la personalidad y las variaciones problemáticas de la personalidad (sujetos-problema).



  3. Transformaciones persistentes de la personalidad, como consecuencia de acontecimientos traumáticos, enfermedad o fenómenos inespecíficos.






  • La propuesta de Millón que incluye un sistema multiaxial para los trastornos de personalidad.


Respecto a estos trastornos Millon dice que se trata de trastornos en los que no existe conciencia de la enfermedad.






  • El DSM-III-R


Trastornos de personalidad están muy relacionados con trastornos de desarrollo y se dividen en tres núcleos por la American Psychiatric Association, la cual propuso once trastornos.






  1. Individuos raros y excéntricos: paranoide, esquizoide y esquizotípico.



  2. Personalidades erráticas, emocionales y teatrales: histriónico, antisocial, narcisista y limite.



  3. Individuos temerosos con marcada ansiedad: dependiente, obsesivo-compulsivo, pasivo-agresivo y trastorno por evitación.


Para casos en los que las características del individuo no se acomodan bien a ninguno de estos grupos, se propone un cuarto núcleo denominado mixto y atípico.


 




CITM-9






Los ocho tipos de personalidad anormal que se describen en la clasificación CITM-9 (organización Mundial de la Salud 1978) son:




Paranoide: personalidad recelosa, predispuesta a sentirse aludida y a desarrollar ideas sobrevaloradas.




Afectiva: Existen anomalías consistentes del estado de animo, ya sea depresión, alegría, o fases cambiantes que van de una a otra.




Esquizoide: Personalidad tímida, reservada, introspectiva y con frecuencia algo excéntrica




Explosiva: Generalmente son pacientes agradables y conformistas, pero tiene brotes subitos de enojo extremo o presenta una conducta compulsiva.




Histérica : Tienen emociones superficiales y poco estables, tienden a dramatizar la situación.




Astenica : Falta de energía y resistencia a afrontar las exigencias cotidianas de la vida.




Antisocial (sociopatica, psicopatica): Muestran repetidas veces una conducta antisocial que no se modifica a través de la experiencia ni por medio de castigo. Pueden ser duros, fríos, agresivos e irresponsables.


 


Etiología






  • La conducta anormal probablemente tiene un origen psicógeno.






  • Principal defecto de la personalidad es no establecer identidad con los medios de adaptación constructivos y socialmente útiles, o no lograr desarrollar los controles para posponer y reprimir los impulsos de actuar que la ira origina.






  • La perdida o ausencia de los padres y los contactos limitados con otras personas privan al niño de las experiencias necesarias para establecer una identidad yoica. El niño que se siente rechazado puede volverse resentido, rebelde y antisocial.






  • Se duda que dicha patología pueda modificarse por experiencias sustitutivas durante etapas posteriores de la vida.






  • Se ha sugerido que las experiencias críticas, que inician el control de los impulsos, tienen lugar durante el segundo año de vida.




Su relación con la enfermedad psiquiatrita






  • Los trastornos de la personalidad parecen causar predisposición a la enfermedad psiquiatrita. Se dice que deberían recibir atención psiquiatrica aun en caso de no existir ninguna enfermedad sobrepuesta


 


Tratamiento


Incluyen características permanentes, que son imposibles de cambiar de manera radical, pero es posible modificar inconvenientes junto con sus efectos nocivos mediante una psicoterapia encaminada a proporcionar una mayor introspección y mejores modelos de conducta.




LA PERSONALIDAD ANTISOCIAL




En el pasado, la mayoría de los pacientes que actualmente reclasifican como de personalidad antisocial, se designaban como individuos de “estado psicópato constitucional” o “personalidad psicopata”. Son personas insensibles, que se dan a los placeres inmediatos, parecen carecer de un sentido de responsabilidad, y a pesar de humillaciones y castigos, no aprenden a modificar su conducta. Carecen de juicio social, sin embargo son capaces de elaborar racionalizaciones verbales que suelen convenirlos de que sus acciones son racionalizadas y justificadas.




Etiología




Existen factores genéticos y constitucionales que producen la personalidad antisocial. Los factores genéticos tienen un papel predisponerte importante en la etiología de la psicopatía y por tanto, hay diferencia constitucional en los individuos.




Los hombres tienden a ser clasificados como psicópatas mucho mas frecuentemente que las mujeres.




Desde el punto de vista psicogenético, la historia familiar revela que en la experiencia de estos individuos hubo un déficit en las transacciones parentales que probablemente produjo desorganización en el yo y en el superyó.




Lo típico es que estos individuos se caracterizan por inmadures emocional que se refleja en la respuesta impulsiva e instantánea que presentan ante sus sentimientos. Su personalidad parece estar dominada por impulsos coercitivos primarios, al grado de excluir la conducta racional. El sociopata nunca aprende ciertas líneas de conducta, especialmente las que van de acuerdo con la sociedad. Algunos de estos niños son hipersensibles, tercos y presentan berrinches con gran frecuencia; lo habitual es que estos sociopatas preadolescentes roben, se escapen de sus hogares, sufran de enuresis, sean destructivos, pendencieros, malhumorados, mentirosos, tercos, desafiantes, desvergonzados y erráticos.




Muchos sociopatas carecen de sutilidad y delicadeza en cuanto a sus sentimientos. No siente cariño hacia nadie; es egoísta, desagradecido, narcisista, y exhibicionista; exige mucho y da poco. No percibe ni juzga sus motivos y es incapaz de juzgar su propia conducta desde el punto de vista de otra persona. Muestra pocos sentimientos de angustia, culpa o remordimiento; sin embrago, en lo profundo de su ser estos sentimientos existen.




Carece de un objetivo definido. En el trabajo suelen ser deficientes, la rutina les parece intolerablemente tediosa. Establece muy escasa relaciones emocionales o lazos afectivos estables. No desarrolla un sentido de los valores sociales.




ETIOLOGIA
















TRASTORNO


DSM-III-R


Millon


ANTISOCIAL


Factores predisponentes:




  • Trastorno por déficit de atención con hiperactividad y el trastorno de conducta durante la prepubertad.



  • Ausencia de disciplina paterna consistente.



  • Malos tratos infantiles.



  • Vivencia fuera del hogar.



  • Desarrollo sin figuras paternas de ambos sexos.




Antecedentes familiares:






  • Tanto los hijos adoptivos como los biológicos de padres con trastorno antisocial, tienen mayor riesgo de presentar T. antisocial de la personalidad, T. por somatización y T. por uso de sustancias toxicas.




Factores biogénicos:




  • Bajos umbrales de estimulación del sistema límbico, especialmente del núcleo amigdalino.






Factores ambientales:




  • Hostilidad perinatal.



  • Modelos parentales deficientes.



  • Conducta vengativa aprendida.













 


Psicopatología




Estos individuos muestran un embotamiento moral y ético. Su vida emocional es superficial y afectivamente fría.




Sus delitos pueden constituir toda la gama del crimen: robo, desfalco, falsificación, asalto a mano armada, ataques sexuales brutales y oros actos de violencia. Para muchos es placentero luchar contra la ley y se sienten orgullosos de sus hazañas. Consideran los castigos como expresiones de injusticia, y no constituyen un freno a su comportamiento.




No aprenden a encara la lucha por la existencia con laboriosidad y perseverancia, sino que viven en un mundo de imaginación y tratan de satisfacer las necesidades de la vida a través del engaño y del fraude. Son incapaces de aceptar sus limitaciones de la realidad






Características clínicas






  • Los psicópatas se comportan de un modo inaceptable para la sociedad en la que viven, pero parecen incapaces de mejorar esa conducta. No pueden mantener reacciones estables y durables con los demás.






  • Henderson ha descrito los tipos: inadaptado, agresivo y creativo.


 


SIGNOS




  • Problemas de inhibición social.



  • Evitación y aislamiento social.



  • Insolidaridad social.



  • Problemas en el establecimiento de relaciones personales estables.




SINTOMAS
















TRASTORNO


DSM-III-R


PROPUESTA DSM-IV


CIE-10


ANTISOCIAL


Conducta irresponsable y antisocial desde los 15 años.


Patrón generalizado de despreocupación y violación de los derechos de los otros.


Cruel despreocupación por los sentimientos de los demás y falta de capacidad de empatía.




LO QUE SUELE DECIR UNA PERSONA ANTISOCIAL






  • "Las normas de otros son malas"



  • "Solo los tontos siguen las normas"



  • "Las normas tienen que eliminarse"



  • "¡Mírenme: soy el mejor!"



  • "Lo primero para mi es el placer"



  • "Si otros sufren por mi conducta es su problema"



  • "¡Tiene que ser ahora, sino me frustraré!"



  • "Tengo que tener cualquier cosa que desee"



  • "Yo soy muy listo en casi todo"



  • No necesito de los demás”



  • Ellos son estúpidos, no me merecen”




Diagnostico


En concreto, los criterios para el diagnóstico del TAP son los siguientes:


 




  • Un patrón general de desprecio y violación de los derechos de los demás que se presenta desde los 15 años, como lo indican tres o más de los siguientes ítems:


 


Fracaso para adaptarse a las normas sociales en lo que respecta al comportamiento legal, como lo indica el realizar reiteradamente actos que son motivo de detención.


Deshonestidad, indicada por mentir repetidamente, usar un alias, estafar a otros para obtener un beneficio o por placer.


Impulsividad o incapacidad para hacer planes a futuro.


Irritabilidad y agresividad, indicados por peleas físicas repetidas o agresiones.


Despreocupación imprudente por su seguridad o la de los demás.


Irresponsabilidad persistente, indicada por la incapacidad de mantener un trabajo con constancia o de hacerse cargo de obligaciones económicas.


Falta de remordimientos, como lo indica la indiferencia o la justificación de haber dañado, maltratado o robado a otros.


Mas Específicamente:




  • El sujeto tiene al menos de 18 años.




  • Existen pruebas de un trastorno disocial que comienza antes de los 15 años.




  • El comportamiento antisocial no aparece exclusivamente en el transcurso de una esquizofrenia o de un episodio maníaco.




  • Haraganería




  • Suspensiones de la escuela




  • Arrestos




  • Huir de casa




  • Consumo de tabaco y alcohol a muy temprana edad




  • Robo




  • Bandalismo




  • Violación frecuente y grave de reglas del hogar o de la escuela




  • Después de los 18 años se pueden presentar:




  • Inestabilidad laboral




  • Fracaso para cumplir con las obligaciones económicas




  • Fracaso para planear




  • Maltrato o descuido de los hijos




  • Promiscuidad




  • Ausencia total de remordimientos




El DSM-IV, (Valdez, 1995) establece cuatro grupos de criterios generales para diagnosticar Trastorno Antisocial de Personalidad, que se expondrán en la siguiente tabla.



























 


Diagnostico diferencial






  • No hay que considerar a todos los delincuentes y criminales como casos de personalidad antisocial o psicópatas. La estructura de la personalidad y sus antecedentes en la historia constitucional y Psicogenética de individuos con trastornos afectivos, esquizofrénicos o casos de retraso mental, difieren de los datos en el pasado del psicópata.






  • Las fuerzas culturales, económicas y sociales pueden determinar la conducta antisocial o desencadenarla, por ejemplo en la guerra.






  • Una característica es que el impulso coercitivo o motivación subyacentes son intensos. Las necesidades apremiantes inmediatas son mas fuertes que cualquier consideración racional.


 


Pronóstico






  • Existe una hipótesis de que al pasar el tiempo los individuos con estos trastornos maduran poco a poco, y participan menos en actos criminales conforme envejecen. Un articulo de Maddock desmiente la valides de esta hipótesis. Pues encontró que aunque la frecuencia de condenas penales disminuye conforme envejecen, tres de cada cinco no establecen una adaptación social satisfactoria.






  • Tôlle observo los distintos caminos que toma la personalidad antisocial. Encontró que algunos pretendían tomar el control aumentando su aislamiento y su anormalidad sociales; otros progresaban su capacidad de utilizar las oportunidades que les ofrecían para mejorar socialmente; otro grupo tuvo éxito gracias por que limito su gama de actividades. Una tercera parte alcanzo las primeras dos líneas de adaptación; otro tercio, se mantuvo en la segunda y el resto logro la ultima meta.




Tratamiento


El tratamiento racional de la persona antisocial tiene que ser diferente al manejo de los neuróticos que llevan a cabo actos delincuentes o criminales. Es esencial colocar al individuo durante un tiempo suficientemente largo en un ambiente caluroso que lo acepte, y donde al paciente le sea posible desarrollar una relación terapéutica con uno de los miembros del grupo de tratamiento.




Una de las medidas correctivas mas eficaces para manejar la delincuencia de los últimos años de la niñez y adolescencia es proporcionar una figura paterna autoritaria, pero afectuosa, con la que puedan identificarse. Con los psicópatas de mayor edad, esto se vuelve cada vez mas difícil debido a una desconfianza básica.




El uso de fármacos suele ser efectivo para producir un cambio duradero en la personalidad o en la conducta visible. Intentos recientes que se han hecho con carbonato de litio sugieren que es posible reducir la conducta agresiva; mientras que el individuo reciba el medicamento en un ambiente controlado. No hay todavía un estudio cuidadoso a largo plazo, ni signos de que las personas que reciben el litio deseen continuar el tratamiento al regresar a la comunidad.




En el caso del sociopata, el psiquiatra se enfrenta a una responsabilidad criminal. Debe tratar de determinar si la conducta criminal es susceptible de interpretación psicopatológica; aunque no es fácil dar pruebas a favor o en contra de dichas interpretaciones; además la sociedad no puede ni debe establecerlas como criterios para juzgar si un individuo es o no responsable de su delito. La cuestión de juzgar si es culpable o no queda completamente en manos de la ley. La función del psiquiatra es solo dar su opinión sobre los motivos y sus orígenes que llevaron al acto criminal.






lunes, 20 de abril de 2009

depresion Y bipolaridad-Equipo 14



Características generales de
los trastornos del estado de ánimo:






Un trastorno del estado de ánimo
implica una perturbación del estado emocional o humor de la
persona; el individuo siente una abrumadora disforia o tristeza.


Para
comprender la naturaleza de los estados de ánimo, es
importante comprender el concepto de un episodio que es un periodo
limitado durante el cual se hacen evidentes los síntomas
intensos del trastorno; algunas formas que pueden caracterizar a un
episodio del estado de ánimo son:


*Gravedad,
utilizando un especificador como leve, moderada o grave


*1º
episodio o síntomas recurrentes (sí el paciente ha
tenido o no una recuperación completa entre episodios)


*Naturaleza
de un conjunto sobresaliente de síntomas





TRASTORNOS
DEPRESIVOS





Los
profesionales de la salud mental distinguen entre 2 formas graves de
depresión


1.-
trastorno depresivo mayor:
incluye episodios agudos, pero de
tiempo limitado, de síntomas depresivos.


2.-
trastorno distímico:
las personas que lo padecen luchan
contra una depresión más crónica, pero menos
grave (estos síntomas han durado al menos dos años en
adultos y un año o más es niños.





TRASTORNO
DEPRESIVO MAYOR





Es
una enfermedad caracterizada por un estado se animo triste, con
perdida de interés o capacidad para sentir placer por
situaciones que antes lo producían, perdida de confianza en sí
mismo y u sentimiento de inutilidad, tiende a ser episódica.














Criterios
diagnósticos de un episodio depresivo mayor



*Durante
un periodo de dos semanas, la mayor parte del tiempo la persona
experimenta al menos cinco de los siguientes síntomas, que
representa un cambio respecto a la actividad previa (debe estar
presente al menos uno de los primeros 2 síntomas


*Estado
de ánimo depresivo


*Disminución
del interés o de la capacidad para el placer en todas o
casi todas las actividades


*Pérdida
importante de peso sin seguir una dieta, o pérdida o
aumento del apetito


*insomnio
o hipersomnia


*Agitación
o retardo psicomotor


*Fatiga
o pérdida de energía


*Sentimientos
de inutilidad o culpa inapropiados


*Disminución
de la capacidad para concentrarse o indecisión


*Pensamientos
recurrentes de muerte o pensamientos suicidas


*Los
síntomas no forman parte de un episodio mixto
(maniaco/depresivo), y no se explican mejor por una enfermedad
médica, el uso de sustancias o por un duelo.


*Los
síntomas causan malestar o deterioro significativos












Prevalencia
y curso del trastorno






El
trastorno depresivo mayor es una alteración psicológica
común. De cada 100 personas aproximadamente 13 hombres y 21
mujeres lo desarrollan en algún momento de su vida (Kessler
et. al, 1994). Con respecto a los adultos mayores de 65 años,
la prevalencia estimada es de 1 a 3 por ciento.





Aproximadamente
40 % de las personas que presentan un episodio nunca vuelven a tener
otro, lo que quiere decir que casi 60 % presentará un segundo
episodio. Entre aquellos que han tenido 2 episodios, 70 % tendrá
un tercero, y entre quienes han tenido tres episodios, 90 %
presentará un cuarto episodio (American Psychiatric
Association)





TRASTORNO
DISTÍMICO: Las personas con un trastorno distímico
presentan al menos durante dos años, algunos de los síntomas
similares a los experimentados por personas con un trastorno
depresivo mayor, sin embargo estos individuos no presentan tantos
síntomas, ni estos son tan severos.


Los
individuos con un trastorno distímico tienden a aislarse de
los demás, a pasar gran parte de su tiempo pensando en
problemas o sintiéndose culpables y a actuar con enojo e
irritabilidad hacia los demás.


Cerca
del 8 % de las mujeres, y 5 % de los hombres padecerán este
trastorno en el transcurso de su vida.








DIAGNOSTICO



Diagnostico diferencial:



Un episodio depresivo mayor debe
distinguirse de un trastorno del estado de ánimo debido a
enfermedad médica. Esto se determina según la historia
clínica la cual nos puede proporcionar antecedentes de
depresión o enfermedad bipolar en la familia, los hallazgos
de laboratorio o la exploración física. Un trastorno
del estado de ánimo inducido por sustancias se distingue del
episodio depresivo mayor por el hecho de que una sustancia (una
droga, un medicamento o un tóxico) se considera
etiológicamente relacionada con la alteración del
estado de ánimo.



Cuando observamos una depresión
severa es fácil reconocerla y hacer el diagnostico. Pero con
frecuencia es difícil distinguir los campos emocionales que se
dan en la vida diaria en las depresiones ligeras o moderadas.



Según el DSM- IV- TR Un
paciente que cumple con nueve de los síntomas expresados en
ese criterio diagnostico tendrá un episodio depresivo mayor.


TRATAMIENTO





Proceso de tratamiento


El
tratamiento de la depresion cubre tres fases:



  • Aguda:
    Se enfoca al inmediato alivio de los sintomas y a la restauracion de
    la funcionalidad


  • De
    continuacion: Cuando los sintomas agudos han desaparecido se inicia
    el tratamiento de continuacion para prevenir cualquier recaida.


  • De
    mantenimiento: La meta consiste en disminuir la posibilidad de
    recaida.






Opciones de tratamiento






  • La
    medicacion :
    Pueden prevenir la reaparicion de la depresion


  • La
    psicoterapia:
    El paciente llega con muchas expectativas y
    temores que deben ser dilucidados en las primeras entrevistas a
    travez de la informacion.


  • La
    terapia electroconvulsiva: (TEC) es ltamente eficaz para el
    tratamiento de cualquier subtipo de depresion resistente


  • Una
    combinacion









PREVENCION



Usted puede prevenir algunos episodios
de depresión:



Evitando el consumo de alcohol, drogas
y cafeína



Haciendo ejercicio con regularidad



Aprendiendo a relajarse y a manejar el
estrés



Manteniendo buenos hábitos de
sueño



La asesoría le puede ayudar en
los momentos de tristeza, estrés o bajo estado de ánimo.
La terapia de familia puede ser particularmente importante para los
adolescentes que se sienten tristes.



En el caso de los ancianos y otras
personas que se sienten socialmente aislados o solitarios, se
recomienda tratar de involucrarlos en actividades grupales y
servicios voluntarios.



Los medicamentos y la asesoría
psiquiátrica pueden prevenir la reaparición de la
depresión. Algunos episodios de depresión no se pueden
prevenir.










TRASTORNO
BIPOLAR





Incluye
la experiencia intensa y perturbadora, de regocijo extremo o euforia,
tal vez alternado con episodios depresivos mayores.


El
término bipolar implica dos polos, manía y depresión;
sin embargo no todas las personas con un trastorno bipolar muestran
señales de depresión.


Un
episodio maniaco es la expresión completa de síntomas
extremos, incluyendo niveles anormalmente elevados del pensamiento,
conducta y emociones, los cuales causan un deterioro social o del
funcionamiento laboral.


Una
persona también puede experimentar un episodio mixto
caracterizado por un periodo que dura al menos una semana, en el que
se presentan juntos los síntomas del episodio maniaco y del
episodio depresivo mayor, de manera alternada y rápida.




















Criterios
diagnóstico de un episodio maniáco



*Periodo
de estado de animo anormal y persistentemente elevado, expansivo o
irritable, que dura al menos una semana.


*Durante
este periodo han persistido tres o más de los siguientes
síntomas (cuatro si el estado de ánimo es solo
irritable)



  • Autoestima
    exagerada o grandiosidad


  • Disminución
    de la necesidad de dormir


  • Habla
    más de lo normal


  • Fuga
    de ideas o pensamiento acelerado


  • Distractibilidad


  • Implicación
    excesiva en actividades placenteras que tiene un alto potencial
    de tener consecuencias graves.



*Los
síntomas no forman parte de un episodio mixto
(maniaco/depresivo), y no se deben a una enfermedad medica o al
uso de sustancias


*Los
síntomas causan malestar o deterioros significativos, o
requieren de hospitalización para prevenir el daño a
uno mismo o a los demás.



TIPOS
DE TRASTORNO BIPOLAR






  • Trastorno
    Bipolar I: describe un curso clínico en que el individuo
    experimenta uno o más episodios maniacos con la posibilidad,
    aunque no la necesidad, de haber tenido uno o más episodios
    depresivos mayores.


  • Trastorno
    Bipolar II: implica que el individuo ha tenido uno o más
    episodios depresivos mayores y por lo menos un episodio hipomaniaco.















Criterios
diagnóstico de un episodio hipomaniaco



*Periodo
durante el cual el estado de ánimo es persistentemente
elevado, expansivo o irritable, durante al menos cuatro días
y que es claramente diferente del estado de ánimo habitual.


*Durante
este periodo han persistido tres o más de los siguientes
síntomas (cuatro si el estado de ánimo es solo
irritable)



  • Autoestima
    exagerada o grandiosidad


  • Disminución
    de la necesidad de dormir


  • Habla
    más de lo habitual


  • Fuga
    de ideas o pensamiento acelerado


  • Distractibilidad


  • Aumento
    de la actividad intencionada o agitación psicomotora


  • Implicación
    excesiva en actividades placenteras con un alto potencial para
    producir consecuencias graves



*No
hay características psicóticas, y el episodio no es
lo suficientemente grave para causar un deterioro notorio o para
necesitar hospitalización


*Los
síntomas no pueden atribuirse a una enfermedad médica
o a los efectos de una sustancia.






Prevalencia
y curso del trastorno





De
la población de Estados Unidos 1.6 % de las personas tiene un
trastorno bipolar en algún momento de su vida. El trastorno
bipolar tiene una prevalencia similar en hombres y en mujeres
(Kessler et. al., 1994), suele aparecer alrededor de los 20 años;
en los adultos mayores de 65 años se estima que la tasa de
prevalencia es de 0.1 %.





Después
de un episodio maniaco único existe 90% por ciento de
probabilidad de que el individuo experimente episodios subsecuentes.





Un
pequeño porcentaje (menor a 15%) de individuos con trastorno
bipolar, tienen entre 4 y 8 episodios, en el transcurso de un solo
año; esto se conoce como ciclos rápidos.





CAUSAS
DE DEPRESIÓN





Sabemos
mucho sobre la depresión, sin embargo, la causa específica
se desconoce en muchos casos. Parece ser el resultado de una
combinación de factores de predisposición genética
aunada a factores médicos y psicológicos.












  • El trastorno
    bipolar
    conocido también como enfermedad maniaco
    depresiva, es un trastorno mental caracterizado por severos cambios
    de animo, yendo desde depresión, con animo excesivamente
    bajo, a la manía, animo excesivamente alto.



DIAGNOSTICO



¿Cómo
hacemos el diagnóstico de un trastorno afectivo bipolar?








El diagnóstico se hace por
criterios clínicos. Es decir: hemos de comprobar si la persona
presenta los síntomas que antes hemos definido, tanto para los
episodios depresivos como los maíacos o hipomaníacos.
La existencia de un solo episodio de exaltación es suficiente
para diagnosticar un trastorno bipolar.



El proceso de diagnóstico debe
iniciarse con un examen físico de la persona a fin de
descartar otras enfermedades que pudieran ocasionar los cambios de
humor. El enfermo suele negar que algo vaya mal o achaca los
problemas a una causa distinta a la enfermedad mental. Por eso, los
miembros de la familia juegan un papel fundamental a la hora de
elaborar un diagnóstico correcto, dado que pueden explicar
cuándo y cómo ha comenzado la persona a actuar de un
modo distinto al habitual. Puesto que la enfermedad bipolar es un
trastorno cíclico del humor, es de vital importancia que el
doctor tenga una visión general del historial mental del
paciente y no pase por alto episodios anteriores. Además, la
información del historial mental familiar puede ser
extremadamente útil, ya que se sabe que el trastorno bipolar
frecuentemente viene de familia.






TRATAMIENTO



Las Etapas de Tratamiento








La fase aguda del tratamiento: El
tratamiento está dirigido a terminar con el presente episodio
maníaco, hipomaníaco, depresivo, o mixto.








El tratamiento preventivo: El
medicamento es continuado a largo plazo para evitar futuros
episodios.


Tratamiento de TB






  • Medicacion
    para estabilizar el animo


  • Psicoeducacion
    sobre TB para padres e hijos


  • Terapia
    cognitivo conductual para tratar la depresion aguda , reducir el
    impacto del stress psocosocial, prevenir las recurrencias, mejorar
    el funcionamiento entre un episodio y otro e incrementar el apego al
    tratamiento


  • En
    caso de imsomnio, considerar otra medicacion sedante, combinada con
    antipsicoticos atipicos.







Los Componentes del Tratamiento








La
medicación
: Prescrita para casi todos los pacientes
durante las fases agudas y en forma preventiva para evitar recaídas.



La
educación
: Cruciales en la ayuda a los pacientes y
familiares para aprender como manejar mejor el disturbio bipolar y
prevenir sus complicaciones.



La
psicoterapia
: Individual, Grupal y Familiar. No debería
ser utilizada a solas, sino más bien debería estar
combinada con medicación (excepto en situaciones especiales
tales como el embarazo).











MEDICAMENTOS



Todas las depresiones que cumplen los
criterios diagnosticos del DSM IV para depresion mayor requieren
tratamiento farmacologico antidepresivo. En terminos generales
aproximadamente entre el 70 y el 85 % de los paciente con depresion
responden a un tratamiento con dosis adecuadas y por el tiempo
suficiente.



Se los conoce como "estabilizadores
del estado de ánimo" (anticíclicos o
antirecurrenciales) son usados para mejorar los síntomas
durante los episodios agudos maníacos, hipomaníacos, y
mixtos. Pueden a veces también reducir síntomas de
depresión. Son el apoyo del tratamiento preventivo a largo
plazo tanto para la manía como para la depresión. Los
más utilizados son los siguientes:



Litio:
Estabilizador del animo, con frecuencia utilizado como tratamiento
inicial (ayuda a prevenir el regreso de los episodios maniacos y
depresivos)



Divalproato
de Sodio y
Carbamazepina:
medicaciones anticonvulsivas, utilizadas también como
estabilizadores de ánimo.







PREVENCION



No existen directrices para la
prevención del trastorno bipolar.


Cuando
se diagnostica adecuadamente, el trastorno bipolar puede tratarse;
aun que no hay cura puede ser controlado adecuadamente. La gente con
esta enfermedad puede comportarse con normalidad, llevar una vida
productiva con una correcta medicación, asistir a terapia y
recibir apoyo social. Sin embargo, pacientes con trastorno bipolar
sufren un gran estigma, que no solo pueden frenar su búsqueda
de tratamiento sino que incluso puede afectar a su situación
laboral, a sus relaciones interpersonales y a su calidad de vida en
general.


















lunes, 13 de abril de 2009

Transtorno Obsesivo Compulsivo. Eq 13



Definición







El trastorno obsesivo-compulsivo (TOC)
es un síndrome psiquiátrico perteneciente al grupo de
los desórdenes de ansiedad caracterizado por:




Obsesiones: Son ideas, pensamientos,
imágenes o impulsos recurrentes y persistentes que son
egodistónicos, es decir, que no son experimentados como
producidos voluntariamente, sino más bien como pensamientos
que invaden la conciencia y que son vividos como repugnantes o sin
sentido. El enfermo realiza intentos para ignorarlos o suprimirlos, a
veces sin conseguirlo







Compulsiones: Son conductas
repetitivas y aparentemente finalistas, que se realizan según
determinadas reglas de forma estereotipada. La conducta no es un fin
en sí misma, sino que está diseñada para
producir o evitar algún acontecimiento o situación
futura. Sin embargo, o bien la actividad no se halla conectada de
forma realista con lo que se pretende impedir o provocar o puede ser
claramente excesiva. El acto se realiza con una sensación de
compulsión subjetiva junto con un deseo de resistir a la
compulsión, por lo menos inicialmente. Por lo general, el
individuo reconoce la falta de sentido de la conducta (algo que no
siempre ocurre en niños pequeños) y no obtiene placer
en llevar a cabo esta actividad, aunque le procure un alivio de su
tensión.







En las personas que sufren este tipo
de desorden, el pensamiento aparece dominado por una idea intrusiva o
secuencia de ideas, que buscan apagar con comportamientos rituales,
casi siempre muy caprichosos. Son plenamente conscientes de su
trastorno, que es vivido como un malestar y puede estar asociado a un
sentimiento de culpa o de vergüenza







Dentro del TOC se pueden diferenciar
siete tipos más comunes:



Lavadores y limpiadores: son personas
a las que carcomen obsesiones relacionadas con la contaminación
a través de determinados objetos o situaciones.

Verificadores: son personas que inspeccionan de manera excesiva
con el propósito de evitar que ocurra una determinada
catástrofe.
Repetidores: son aquellos individuos que se
empeñan en la ejecución de acciones repetitivas.

Ordenadores: son personas que exigen que las cosas que las rodean
estén dispuestas de acuerdo con determinadas pautas rígidas,
incluyendo distribuciones simétricas.
Acumuladores:
coleccionan objetos insignificantes, de los que no pueden
desprenderse.
Ritualizadores mentales: acostumbran a apelar a
pensamientos o imágenes repetitivos, llamados compulsiones
mentales, con el objeto de contrarrestar su ansiedad provocadora de
ideas o imágenes, que constituyen las obsesiones.

Atormentados y obsesivos puros: experimentan pensamientos
negativos reiterados, que resultan incontrolables y bastante
perturbadores. No obstante, a diferencia de quienes sufren los demás
tipos de TOC, no se entregan a comportamientos reiterativos de tipo
físico, sino rumiaciones mentales.











Epidemiología







El trastorno obsesivo-compulsivo (TOC
es hoy reconocido como un problema común que afecta al 2-3% de
la población, es decir a más de 100 millones de
personas en todo el mundo. Es considerada en la actualidad como una
enfermedad común dentro de la etapa de la adolescencia, La
edad en que la enfermedad se manifiesta o resalta con mayor fuerza es
entre los 12 y los 16 años



Los síntomas del T.O.C. pueden
presentarse a cualquier edad a partir de los 6 años y pueden
producir una importante discapacidad: la
OMS
lo incluye entre las 20 primeras enfermedades discapacitantes con una
prevalencia del 0,8% en los adultos y del 0,25% en niños y
adolescentes, y entre las 5 enfermedades psiquiátricas más
discapacitantes.




Una persona con TOC se da cuenta
de que tiene un problema. Normalmente, sus familiares y amigos
también se dan cuenta. Los pacientes con TOC suelen sentirse
culpables de su conducta anormal y sus familiares pueden enfadarse
con ellos porque no son capaces de controlar sus compulsiones. Otras
veces, en su deseo de ayudarles pueden aparentar que los síntomas
no existen, o justificarlos o, incluso, colaborar en sus rituales.



























































































































Sintomatología







Los síntomas pueden incluir:



preocupación exagerada por la
suciedad, los gérmenes o la contaminación



dudas reiteradas (por ejemplo, si la
puerta está cerrada o no)



pensamientos persistentes acerca de la
violencia, las heridas, matar a alguien o herirse a sí mismo



períodos excesivos de tiempo
tocando cosas, contando, pensando en números y secuencias



preocupación por el orden, la
simetría o la exactitud



pensamientos persistentes acerca de
actos sexuales repugnantes o la demostración de conductas
prohibidas o consideradas tabú



pensamientos preocupantes que están
en contra de las propias convicciones religiosas



necesidad extrema por saber o recordar
cosas que pueden ser muy triviales



atención excesiva en los
detalles



preocupación excesiva de que
algo terrible suceda



pensamientos, impulsos o conductas
agresivas



Conductas compulsivas como



lavarse repetidamente las manos (a
menudo 100 veces al día o más)



controlar y volver a controlar en
repetidas oportunidades (por ejemplo, asegurarse de que la puerta
esté cerrada con llave)



establecer reglas de orden rígidas
(por ejemplo, ponerse la ropa en el mismo orden todos los días,
guardar las pertenencias en la habitación en un orden muy
especial y molestarse si este orden se altera)



acumular objetos



contar y volver a contar excesivamente



agrupar o secuenciar objetos



repetir palabras dichas por uno mismo
(palilalia) o por otros (ecolalia); formular las mismas preguntas una
y otra vez



coprolalia (decir obscenidades
continuamente) o copropraxia (hacer gestos obscenos continuamente)



repetir sonidos, palabras, números
o música para uno mismo

















































































Etiología







La tomografía de emisión
transaxial de positrón TETP sugiere la posibilidad de algunas
anormalidades en el lóbulo frontal y en los ganglios básales
que influyen en los síntomas del



TOC.



También sugiere alteraciones de
algunos neurotransmisores



Uno es la serotonina, un
neurotransmisor que se cree que ayuda a regular la disposición
de ánimo, la agresión y la impulsividad. Las neuronas
que responden a la serotonina se encuentran en todo el cerebro, pero
especialmente en los lóbulos frontales y en los ganglios
básales







El TOC suele ser una característica
familiar, lo que sugiere la presencia de un componente genético
y ambiental. Sin embargo, también puede desarrollarse sin
antecedentes familiares del trastorno.







Estudios recientes sugieren que las
infecciones por estreptococos pueden provocar la aparición del
TOC o agravarlo







Tratamiento







Farmacoterapia




Pruebas clínicas en años
recientes han mostrado que drogas que afectan el neurotransmisor
serotonina pueden reducir significativamente los síntomas de
TOC.



El primero de estos inhibidores
selectivos de la recaptación de serotonina (SRI) [siglas
corresponden al nombre en inglés: serotonin reuptake
inhibitors] es el antidepresivo tricíclico clomipramina
(Anafranil).



Esto fue seguido por otros SRI
llamados "inhibidores selectivos de la recaptación de
serotonina" (SSRIs) [siglas corresponden al nombre en inglés:
"selective serotonin reuptake inhibitors"]. Aquellos que
han sido aprobados por la Administración de Alimentos y Drogas
(Food and Drug Administration - FDA) para el tratamiento de TOC son
fluoxetina (Prozac ), fluvoxamina (Luvox) y paroxetina (Paxil). Otro
que ha sido estudiado en pruebas clínicas controladas es
sertralina (Zoloft ).







Terapia conductista




Un método específico
de terapia conductista llamada "prevención de exposición
y reacción" [exposure and response prevention"] es
efectivo para muchas personas con TOC.



Este método implica que el
paciente se enfrenta, deliberada o voluntariamente, al objeto o idea
temida, ya sea directamente o con la imaginación. Al mismo
tiempo, el paciente es alentado a abstener de sus rituales con apoyo
y estructura provistos por el terapeuta, y posiblemente por otros que
el paciente reclute para asistirle.







El tratamiento se empieza por una
compulsión que provoque poca ansiedad en el paciente, y una
vez superada ésta, se pasa a la siguiente, y así paso
por paso, guiado por la habilidad del paciente a tolerar
ansiedad
y controlar los rituales. A medida que progresa el tratamiento, la
mayoría de los pacientes gradualmente sienten menos ansiedad
causada por los pensamientos obsesivos y pueden resistir los impulsos
compulsivos.







Una vez que se haya avanzado en la
E.P.R. se suele pasar a la Terapia cognitiva-conductual, también
muy efectiva para este trastorno. Esta terapia hace énfasis en
cambiar las creencias y esquemas de pensamiento del enfermo de T.O.C.



Terapia de orientación
psicoanalitica.



Ésta debe dar énfasis a
indagar el origen por medio de asociaciones propias del paciente de
sus obsesiones y compulsiones.



Freud
tuvo un caso emblemático de un paciente que llamó de
"Neurosis Obsesiva", denominado El hombre de las ratas.
En este caso se veía que sus compulsiones y obsesiones tenían
elementos que se repetían a nivel inconsciente desde la
homofonía de palabras o de situaciones relacionadas a la
historia familiar del individuo.



Existe, desde la teoría
freudiana, el supuesto básico del "conflicto psíquico"
en donde el sujeto, genera síntomas como satisfacciones
sustitutivas a los deseos reprimidos . El yo del neurótico
queda avasallado por el conflicto entre los mandatos y las
reglamentaciones superyoicas y su inconsciente.



De esta forma, lo inconsciente sólo
puede aflorar mediante formaciones de compromiso que conforman los
síntomas obsesivos.



Diagnostico diferencial



El Trastorno Obsesivo-Compulsivo
(TOC), ha de diferenciarse de otros trastornos formalmente
parecidos:

- TRASTORNO DE ANSIEDAD DEBIDO A ENFERMEDAD
MÉDICA
: si existen obsesiones y/o compulsiones, se
explican por los efectos fisiológicos directos de una
enfermedad médica.

- TRASTORNO DE ANSIEDAD INDUCIDO
POR SUSTANCIAS
: las obsesiones y compulsiones se explican por los
efectos fisiológicos directos de una sustancia -drogas o
medicamentos-.

- TRASTORNO DISMÓRFICO CORPORAL:
el contenido de obsesiones y rituales es, únicamente, la
preocupación por la propia apariencia.

- FOBIA
ESPECÍFICA O SOCIAL
: inquietud por un objeto o situación
temida y no por el contenido de las ideas obsesivas.

-
TRICOTILOMANÍA: ideas o rituales recurrentes
relacionados con arrancarse el cabello.

- EPISODIO
DEPRESIVO MAYOR
: constantes cavilaciones sobre hechos
desagradables, congruentes con el estado de ánimo negativo. No
son ideas egodistónicas, es decir, la persona no las ve como
algo ajeno a sí misma -a diferencia del trastorno
obsesivo-compulsivo-.

- TRASTORNO DE ANSIEDAD GENERALIZADA:
hay preocupaciones excesivas, diferentes de las obsesiones en que las
preocupaciones se viven como inquietud excesiva por hechos de la vida
real -ej. por perder el empleo-, además que se experimentan
como autogeneradas (egosintónicas).

- HIPOCONDRÍA:
ideas recurrentes por el miedo a padecer o estar padeciendo una
enfermedad, a partir de la mala interpretación de síntomas
físicos. No suelen existir rituales como lavados o
repeticiones excesivas.

- FOBIA ESPECÍFICA A LA
ENFERMEDAD
: tampoco hay rituales, y la preocupación más
que por padecer ya la enfermedad, es por la posibilidad de
contraerla.

- TRASTORNO DELIRANTE O TRASTORNO PSICÓTICO
NO ESPECIFICADO
: las obsesiones o compulsiones se desmarcan de la
realidad -ej. creer que uno es responsable de la muerte de otra
persona, porque una vez se la deseó-. Además, suele
haber otros síntomas psicóticos.

-
ESQUIZOFRENIA: ideas delirantes recurrentes y comportamientos
estereotipados extraños no congruentes con la realidad, y
egosintónicos -sintonizan con la propia persona-. En
ocasiones, se presentan ambos diagnósticos.

- TRASTORNO
DE TICS O TRASTORNO DE MOVIMIENTOS ESTEREOTIPADOS
: tanto tics
-ej. aclaramiento de garganta, parpadeo repetitivo- como movimientos
estereotipados ej. tambalearse, morderse a uno mismo- son menos
complejos que las compulsiones y no tienen como objetivo eliminar una
obsesión. Es posible que se den síntomas del trastorno
obsesivo-compulsivo y del trastorno por tics a la vez,
diagnosticándose ambos.

- COMPORTAMIENTOS DIRIGIDOS
ASOCIADOS CON OTROS TRASTORNOS MENTALES
: Juego patológico,
Parafilias, Trastornos alimentarios, y Dependencia o Abuso de
alcohol. Existen pensamientos recurrentes y comportamientos
excesivos, referidos respectivamente a jugar, actividad sexual, la
comida o el alcohol, que no pueden considerarse obsesiones porque la
persona obtiene placer. Si los desea abandonar es por lo perjuicios
que le acarrean.

- TRASTORNO OBSESIVO-COMPULSIVO DE LA
PERSONALIDAD
: no hay ni obsesiones ni compulsiones. Se
caracteriza por una permanente preocupación por el orden, el
control y el perfeccionismo. Si se cumplen los criterios se pueden
hacer ambos diagnósticos.

- SUPERSTICIONES NO
PATOLÓGICAS Y COMPORTAMIENTOS REPETITIVOS
: no consumen
demasiado tiempo, ni afectan excesivamente a actividades cotidianas
de la persona. Además no provocan un malestar significativo.







Diagnostico definitivo







CRITERIOS DEL DSM-IV PARA EL
DIAGNÓSTICO DEL TRASTORNO OBSESIVO-COMPULSIVO. Fuente AMERICAN
PSYCHIATRIC ASSOCIATION


A. Se cumple para las obsesiones y
las compulsiones:

Las obsesiones se definen por 1, 2, 3 y
4:

1. pensamientos, impulsos o imágenes recurrentes y
persistentes que se experimentan en algún momento del
trastorno como intrusos e inapropiados, y causan ansiedad o malestar
significativos
2. los pensamientos, impulsos o imágenes no
se reducen a simples preocupaciones excesivas sobre problemas de la
vida real
3. la persona intenta ignorar o suprimir estos
pensamientos, impulsos o imágenes, o bien intenta
neutralizarlos mediante otros pensamientos o actos
4. la persona
reconoce que estos pensamientos, impulsos o imágenes obsesivos
son el producto de su mente (y no vienen impuestos como en la
inserción del pensamiento)

Las compulsiones se definen
por 1 y 2:

1. comportamientos (p. ej., lavado de manos, puesta
en orden de objetos, comprobaciones) o actos mentales (p. ej., rezar,
contar o repetir palabras en silencio) de carácter repetitivo,
que el individuo se ve obligado a realizar en respuesta a una
obsesión o con arreglo a ciertas reglas que debe seguir
estrictamente
2. el objetivo de estos comportamientos u
operaciones mentales es la prevención o reducción del
malestar o la prevención de algún acontecimiento o
situación negativos; sin embargo, estos comportamientos u
operaciones mentales o bien no están conectados de forma
realista con aquello que pretenden neutralizar o prevenir o bien
resultan claramente excesivos

B. En algún momento del
curso del trastorno la persona ha reconocido que estas obsesiones o
compulsiones resultan excesivas o irracionales.
Nota: Este punto
no es aplicable en los niños.

C. Las obsesiones o
compulsiones provocan un malestar clínico significativo,
representan una pérdida de tiempo (suponen más de 1
hora al día) o interfieren marcadamente con la rutina diaria
del individuo, sus relaciones laborales (o académicas) o su
vida social.

D. Si hay otro trastorno, el contenido de las
obsesiones o compulsiones no se limita a él (p. ej.,
preocupaciones por la comida en un trastorno alimentario, arranque de
cabellos en la tricotilomanía, inquietud por la propia
apariencia en el trastorno dismórfico corporal, preocupación
por las drogas en un trastorno por consumo de sustancias,
preocupación por estar padeciendo una grave enfermedad en la
hipocondría, preocupación por las necesidades o
fantasías sexuales en una parafilia o sentimientos repetitivos
de culpabilidad en el trastorno depresivo mayor).

E. El
trastorno no se debe a los efectos fisiológicos directos de
una sustancia (p. ej., drogas, fármacos) o de una enfermedad
médica.

Especificar si:
Con poca conciencia de
enfermedad: si, durante la mayor parte del tiempo del episodio
actual, el individuo no reconoce que las obsesiones o compulsiones
son excesivas o irracionales.

CRITERIOS CIE-10 PARA EL
DIAGNÓSTICO DE TRASTORNO OBSESIVO- COMPULSIVO. Fuente:
ORGANIZACIÓN MUNDIAL DE LA SALUD

La característica
esencial de este trastorno es la presencia de pensamientos obsesivos
o actos compulsivos recurrentes.




Para un diagnóstico definitivo
deben estar presentes y ser una fuente importante de angustia o de
incapacidad durante la mayoría de los días al menos
durante dos semanas sucesivas, síntomas obsesivos, actos
compulsivos o ambos.

Los síntomas obsesivos deben
tener las características siguientes:

a) Son
reconocidos como pensamientos o impulsos propios.

b) Se
presenta una resistencia ineficaz a por lo menos uno de los
pensamientos o actos, aunque estén presentes otros a los que
el enfermo ya no se resista.

c) La idea o la realización
del acto no deben ser en sí mismas placenteras (el simple
alivio de la tensión o ansiedad no debe considerarse
placentero en este sentido).

d) Los pensamientos, imágenes
o impulsos deben ser reiterados y molestos.

Incluye:
Neurosis
obsesivo-compulsiva.
Neurosis obsesiva.
Neurosis
anancástica.

Con predominio de pensamientos o
rumiaciones obsesivos:


Con predominio de actos
compulsivos (rituales obsesivos):

La mayoría de los
actos compulsivos se relacionan con la limpieza (en particular el
lavado de las manos), con comprobaciones repetidas para asegurarse de
que se ha evitado una situación potencialmente peligrosa, o
con la pulcritud y el orden. En la conducta manifiesta subyace por lo
general un miedo a ser objeto o motivo de un peligro y el ritual es
un intento ineficaz o simbólico de conjurar ese peligro. Los
rituales compulsivos pueden ocupar muchas horas de cada día y
suelen acompañarse a veces de una marcada incapacidad de
decisión y de un enlentecimiento. En conjunto, son tan
frecuentes en un sexo como en el otro, pero el lavado de manos ritual
es más frecuente en las mujeres y el enlentecimiento sin
repeticiones es más común en los varones.
Los
rituales están menos íntimamente relacionados con la
depresión que los pensamientos obsesivos y responden con mayor
facilidad a las terapéuticas de modificación del
comportamiento.

Con mezcla de pensamientos y actos
obsesivos:

La mayoría de los enfermos con un trastorno
obsesivo-compulsivo presentan tanto pensamientos obsesivos como
compulsiones. Esta subcategoría debe ser usada cuando ambos
son igualmente intensos, como es frecuente, aunque es útil
especificar sólo uno cuando destaca con claridad ya que
pensamientos y actos pueden responder a tratamientos diferentes.







Pronóstico 



El trastorno obsesivo-compulsivo es
una enfermedad prolongada (crónica) con períodos de
síntomas graves, seguidos de períodos de mejoramiento.
Sin embargo, es poco común que se presente un período
completamente libre de síntomas. La mayoría de las
personas mejora con el tratamiento.



Una compilación reciente de
estudios de resultado indica que de más de 300 pacientes con
TOC que fueron tratados con prevención de exposición y
reacción, un promedio del 76 por ciento todavía
demostraba aligeramiento significativo 3 meses a 6 años
después del tratamiento (Foa & Kozak, 1996). Otro estudio
ha encontrado que el incorporar componentes de prevención de
recaída en el programa de tratamiento, junto con sesiones de
seguimiento luego de terapia intensiva, contribuye al mantenimiento
de mejoría (Hiss, Foa y Kozak, 1994).




Prevención







Aún se desconocen medidas
preventivas que permitan reducir la incidencia de los trastornos de
TOC en los adolescentes. Sin embargo, la detección e
intervención precoces pueden reducir la gravedad de los
síntomas, estimular el crecimiento y el desarrollo normal y
mejorar la calidad de vida de los niños o adolescentes que
tienen trastornos de ansiedad.